Investigadores y Estudiantes de la Universidad Autónoma de Aguascalientes (UAA) presentaron los resultados de un proyecto de evaluación y restauración del Molino San Blas al Instituto Nacional de Antropología e Historia.
En la ejecución de este proyecto se aplicaron novedosas técnicas poco utilizadas no sólo en México sino en la mayoría de los países, entre ellas, identificar la evolución de grietas en edificios.
La propuesta de la UAA es reactivar la zona en torno al molino de San Blas, ubicado en Pabellón de Hidalgo. Este es un sitio con gran valor histórico ya que por ahí pasó el Ejército Insurgente.
Entre otras cosas, la máxima casa de estudios realizó un estudio de evaluación para la estabilización y mejora de la condición estructural del inmueble.
Raudel Padilla Ceniceros y Jesús Pacheco Martínez, investigadores del Centro de Ciencias de Diseño y de la Construcción de la UAA, así como estudiantes, realizaron este proyecto después de que les fuera solicitado un diagnóstico del molino por parte de la delegación estatal del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Los investigadores del cuerpo académico de Estudios y Proyectos en Ingeniería Civil de la UAA expusieron ante autoridades universitarias y de la delegación del INAH que entre las principales afectaciones de la edificación está la correspondiente a la estructura de la parte sur del inmueble. Además, hay daños en algunos de los arcos y paredes exteriores correspondientes a la fachada, en canales obstruidos, pinturas con grafiti en muros y otros derivados del ambiente húmedo, entre otros.
Estos daños estructurales fueron detectados gracias a la aplicación de novedosas técnicas que son poco utilizadas en México, entre ellas, la fotogrametría que es utilizada para la obtención de mapas y planos de grandes extensiones de terreno por medio de la fotografía aérea; el monitoreo de grietas en el inmuebles a través de fisurómetros, instrumentos desarrollados en la propia UAA que permiten registrar la evolución de las fisuras; así como una caracterización dinámica del edificio, que comprende el estudio a través de un software avanzado de la salud estructural de toda la edificación.
Estas nuevas técnicas permiten tener más certeza sobre la situación estructural de los edificios y apenas se comienzan a utilizar en algunas zonas de Europa, por lo que la UAA es punta de lanza en la utilización de nuevas metodologías en este tipo de estudios.
El delegado del INAH en Aguascalientes, Héctor Castanedo Quirarte, dijo que la participación de la UAA en este proyecto se desprende del convenio que se firmó tiempo atrás y que permite emprender trabajos de este tipo.
Castanedo Quirarte adelantó que a partir del estudio realizado por la UAA se continuará con un proyecto de restauración con otras instituciones y demás especialistas para crear una propuesta sólida que permita gestionar los recursos necesarios para iniciar con los trabajos de rescate.
Durante esta investigación también participaron estudiantes de la licenciatura y maestría en Ingeniería Civil y de la carrera de Arquitectura; así como Jorge Guadalupe Villanueva Clavel e Iván Israel Sánchez Silva, arquitectos del INAH del estado.
