Ricardo Magdaleno Rodríguez
Aguascalientes, Ags.- A Ricardo Magdaleno Rodríguez se le conoce, y se le reconoce, por su amplia trayectoria como ingeniero civil que lo ha llevado a participar ya sea directa o indirectamente con los estudios de suelo y de resistencia de materiales en muchas obras construidas en Aguascalientes. Otros lo conocen también por la temporada que pasó en el Servicio Público como Presidente Municipal.
Sin embargo, no es tan conocido por su trabajo en el campo del servicio social, a pesar de que por muchos años ha participado o dirigido una de las instituciones altruistas que ha aportado grandes beneficios a nuestra comunidad en el área de la salud: el Banco de Ojos y Tejidos.
No es usual que un ingeniero civil encabece una institución médica; por ello y por la trascendencia de ese proyecto, la intención inicial era incluir a Ricardo Magdaleno Rodríguez entre los personajes que han hecho latir a Aguascalientes.
Desde que lo contactamos para participar en este proyecto (ver nota al final), su planteamiento fue claro: el Banco de Ojos y Tejidos de Aguascalientes, del que es Presidente desde hace varios años, es una iniciativa que surgió y que funciona gracias al trabajo de muchas personas, y él -Magdaleno Rodríguez- solamente es quien coordina en la actualidad el trabajo de muchos. El que ha sido Presidente de su Colegio profesional y Presidente Municipal de nuestra ciudad no quiere, ni necesita, apropiarse de méritos ajenos.
Presenciar una sesión ordinaria de Consejo del Banco de Ojos y Tejidos, A. C. ayuda a entender porqué esta institución se ha sostenido y ha crecido en los últimos 30 años. Los asuntos a tratar van desde las grandes líneas de la iniciativa y la gestión de recursos, hasta los detalles más pequeños de la atención al paciente de acuerdo a los estándares internacionales. Eso no es nuevo, ya que ha sido la infalible fórmula del éxito: los ojos en el cielo y los pies firmes en el suelo, es decir, que hay que plantearse objetivos ambiciosos, pero al mismo tiempo atender a las cuestiones diarias y llegar hasta los detalles que en apariencia pudieran tener menos importancia.
Hace 30 años, había una lista de espera de más de 3 mil personas. Hoy, disponibilidad inmediata de córneas para trasplante
Iniciaba la década de los años 90´s cuando un médico aguascalentense regresaba a su tierra luego de culminar una especialidad médica en la Ciudad de México. El Doctor Héctor Randolph Rodríguez, había hecho su Especialidad en Oftalmología en una institución singular, el Hospital de la Asociación para evitar la Ceguera en México, que cada día recibe a cientos de pacientes en una estrecha calle de Coyoacán, una de las zonas más exclusivas y arboladas de la capital del país. Persona clave de ese hospital era entonces un médico que había ayudado ya a cientos de aguascalentenses con problemas de la vista: el Doctor Diego Cuevas Cancino consultaba los fines de semana en la ciudad de Zacatecas y muchas personas de aquí se atendían con él en la vecina ciudad.
Al regresar a Aguascalientes, el Doctor Randolph se encontró con que las personas que requerían de un trasplante de córnea debían anotarse en una lista de espera a nivel nacional en la que había ya más de 3 mil pacientes. En la práctica esa lista era inoperante para los pacientes de la provincia, ya que se convocaba para los trasplantes sólo a quienes vivían en la Ciudad de México. Y por una sencilla razón: quienes vivían lejos no podían llegar al hospital en cuestión de horas para recibir el trasplante, ya que una vez extraída, la córnea se puede mantener solamente pocas horas en condiciones ideales y eso mediante un sistema de conservación que tiene un elevado costo. Por ello, resultaba imposible en la práctica que alguien de nuestra ciudad recibiera un trasplante de córnea.
Oftalmólogos, la Cruz Roja y un Club Rotario en el nacimiento del Banco de Ojos
El Doctor Randolph, que ya era miembro del Colegio de Oftalmología de Aguascalientes, A. C., acudió en primera instancia al Doctor Juan José de Alba, entonces Presidente local de la Delegación Estatal de la Cruz Roja Mexicana. Dado que un proyecto para realizar aquí trasplantes de córnea requería de costosos equipos, ambos médicos comentaron el tema con el entonces Presidente del Club Rotario de Aguascalientes, el Contador Francisco Javier Magdaleno Rodríguez. Luego de recabar informes, el Club asumió el compromiso de apoyar el proyecto y varios de los socios se unieron de manera entusiasta a la idea. Entre ellos, tres que compartían el nombre de Guillermo: Medina, Salcedo y Sandoval.
Para quienes no conocen la forma de trabajar del movimiento Rotario, vale la pena comentar brevemente cómo financian sus proyectos de asistencia social. Cada club aporta recursos a un organismo internacional que es la Fundación Rotaria; cuando hay la decisión de apoyar un proyecto, el club que promueve la idea se “hermana” con otros clubes del país o de otros países y la Fundación les regresa –multiplicados- los recursos que aportaron.
En el caso del Banco de Ojos, los rotarios de Aguascalientes encontraron un entusiasta aliado en los clubes rotarios de San Antonio Texas y de otros estados de la Unión Americana que han apoyado por décadas el proyecto. Gracias a esos y a otros apoyos ha sido posible que el Banco cuente con aparatos oftalmológicos de última generación que permiten hacer el diagnóstico, las intervenciones y alcanzar un alto porcentaje de éxito en los trasplantes, ya que 98 de cada 100 han sido exitosos.
El Banco de Ojos comenzó a operar en las instalaciones que la Cruz Roja tenía en la calle Primo Verdad del Centro de la ciudad de Aguascalientes. Tiempo después, gracias a la donación de un terreno que les hiciera el Municipio de Aguascalientes, se construyeron y entraron en funcionamiento en el año 2005 unas modernas instalaciones que cuentan con área de consulta externa, quirófano con los más altos estándares de sanidad, laboratorio químico, almacenes especializados para las córneas y tejidos, áreas administrativas y hasta una pequeña capilla que conserva las imágenes que han llevado como muestra de agradecimiento los propios pacientes y sus familias.
Desde su inicio, el funcionamiento de esta iniciativa se apegó a la reglamentación oficial vigente y ha contado con las licencias sanitarias expedidas por la Secretaría de Salud y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS). Cuenta también con la autorización de la autoridad fiscal para recibir donaciones y expedir recibos deducibles de impuestos.
Ampliar los objetivos para aprovechar mejor la estructura y las instalaciones
Aunque en un principio el objetivo era apoyar en cuestiones oftalmológicas, con el paso del tiempo vieron la conveniencia de ampliarse para aprovechar mejor sus instalaciones y su capacidad operativa. Y así, se añadió una palabra al nombre de la institución y el Banco de Ojos pasó a ser Banco de Ojos y Tejidos de Aguascalientes, A.C.
Dado que los avances médicos de nuestro tiempo hacen posible el trasplante de órganos y de tejidos, ahora, además de atender cualquier consulta oftalmológica y realizar trasplantes de córneas, atienden también los requerimientos de trasplantes de hueso y otros tejidos como la piel.
La asociación estratégica con otras instituciones, como la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), les permite atender con celeridad los requerimientos de huesos y tejidos para rehabilitar a personas que han tenido accidentes viales, laborales o que han sufrido quemaduras de diversas intensidades y tipos.
Ante los avances médicos que hacen posible la regeneración de órganos y tejidos a partir de las células madre, la institución amplió su objetivo y desde 2007 es también un Banco de Sangre y de Células Madre.
El paso lógico de todo este esfuerzo médico es que el Banco de Ojos y Tejidos evolucionó en el año 2005 para ser también un Centro de Investigación Clínica en el que varios médicos investigadores aplican su conocimiento y experiencia en el trato con pacientes. Los protocolos de investigación son aprobados y están bajo seguimiento de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS).
Más de 51 mil consultas, 12 mil cirugías, más de 1,300 trasplantes y 4,400 córneas cedidas a otras instituciones
En sus 30 años de vida, el Banco de Ojos y Tejidos de Aguascalientes, A. C. ha prestado más de 51 mil consultas oftalmológicas a más de 20 mil pacientes, ha realizado más de 12,000 cirugías y hasta el mes de septiembre de este año 2021 llevaba realizados 1,309 trasplantes de córnea y facilitado más de 4,400 córneas a otras instituciones médicas que las requerían para trasplantes.
En todos los casos de consultas, intervenciones y trasplantes, interviene de manera previa el área de Trabajo Social para valorar la capacidad económica del paciente y ver la posibilidad de aportarle la mayor ayuda posible. Cuando un paciente puede cubrir el costo de su consulta o intervención, el costo es similar o menor al de otras instancias médicas de su tipo en Aguascalientes, ya que el objetivo sigue siendo apoyar a quien lo requiera.
Promover las culturas de prevención de accidentes y de donación de órganos
Toda esta labor médica se complementa con la tarea de inculcar en la población una cultura de prevención de accidentes que provocan quemaduras y la cultura de la donación de órganos. Además, se encargan de capacitar a las personas que trabajan en instituciones similares en otros estados del país.
Aguascalientes, que cuenta con el 1% de la población de México y es uno de los últimos estados en materia demográfica, ocupa el noveno lugar en lo que corresponde a los trasplantes de córnea. Y el 95% de esos trasplantes hechos en el estado se realizaron con la participación del Banco de Ojos.
Es una institución que trabaja mucho, en la que colaboran muchas personas, cada una en la medida de sus posibilidades y que hace mucho bien a Aguascalientes. Lo único que hace a baja escala es ruido mediático: se publicita poco.
Como puede verse, la experiencia de un ingeniero civil que coordina el trabajo de médicos, técnicos, administrativos y trabajadoras sociales ha sido exitosa. Aunque vale decir que no todos los que han presidido el Patronato de esta institución en sus diversas épocas han sido ingenieros.
Lo que resulta innegable es que, en buena parte, la visión de Aguascalientes se debe a ellos.
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El texto anterior forma parte de materiales escritos en el año 2018 y 2019, originalmente pensados para formar parte de un libro que, por diversos motivos, no llegó a publicarse. Las cifras, sin embargo, fueron actualizadas al mes de octubre de este 2021.
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